Imagínate que en lugar de buscar trabajo o clientes las oportunidades vienen a ti, simplemente por el hecho de mostrar quien eres. Parece un sueño, pero no es así, hay muchas personas que lo hacen, y pueden hacerlo porque han entendido el enorme poder de la marca personal.
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En un mundo súper conectado como en el que vivimos hoy, la marca personal impacta la manera en que somos vistos y recordados en el trabajo, ya que deja ver la calidad de nuestro desempeño y revela qué tipo de profesional somos. Esto deja huella en la memoria de las personas con las que nos relacionamos y genera un área de influencia que puede llegar muy lejos.
No es gratis que ejecutivos de alto nivel, emprendedores o celebridades inviertan tiempo y recursos específicamente en su personal branding. Lo hacen porque saben que revelar de manara natural quiénes son, en qué son buenos, por qué son diferentes y por qué deberían contratarlos o hacer negocios con ellos les genera muchas oportunidades.
La marca personal no es una varita mágica, no genera oportunidades de la nada, se necesita trabajo, habilidades y talento para echarla a andar, y entonces sí, ayudarnos a destacar. Por eso mismo, la marca personal tiene que ser diferente, arriesgada y auténtica. Nadie necesita a dos personas exactamente iguales, dos opiniones idénticas o muy parecidas no sirven de nada.
Así que no tengas miedo para mostrarte exactamente cómo eres, celebrando tus diferencias y puntos de vista. No tienes que gustarle a todo el mundo, nada más a las personas con las que quieres trabajar y colaborar.
La marca personal existe en todas las industrias y a todos niveles, hoy vamos a revisar cuatro ejemplos de celebridades que se han atrevido a ser diferentes, disruptivos y exitosos. No digo que tienes que ser así, pero algunas de sus ideas pueden ayudar a cualquiera.
A continuación, 4 marcas personales disruptivas y exitosas:
1. Elon Musk
Su nombre es casi tan conocido como el de la Coca Cola. Es uno de los hombres más ricos del mundo además de ser un innovador por naturaleza.
Contrario a la mayoría de hombres de negocios que prefieren pasar casi desapercibidos, Musk no tiene miedo en reconocerse como una figura pública. Se atreve a opinar sobre cuestiones de medio ambiente, economía o cultura porque sabe que su marca pesa.
Dueño de Tesla Motors y Space X, recurre con frecuencia a las redes sociales para compartir sus puntos de vista sin miedo a los comentarios de sus detractores, es tan transparente – muchas veces torpe – que sus puntos de vista suenan como el compañero con el que tomas café después del almuerzo.
Musk es sinónimo de calidad, innovación y audacia, no se detiene mucho para expresar sus puntos de vista, parece no importarle lo que puedan comentarle. La marca personal de Elon Musk representa un nuevo modelo de hombre de negocios, atrevido y transparente.
2. Billie Eilish
¿Te acuerdas cuando la música pop era sencilla y cosa de gente más o menos normal?, se hizo tan predecible y aburrida que la generación X y los Millennials le dieron la espalda. Fue entonces cuando apareció Lady Gaga para hacerla divertida otra vez. Curiosamente poco a poco se fue alineando con lo comercial y dejó un espacio para una figura como Bille Eilish.
Billie es una combinación entre egocéntrica y completamente rara. Puede ser odiosa o encantadora en la misma entrevista, su música coquetea con ser alternativa, pero en el fondo es tan pop como cualquier otro. Los expertos dirían que es la anti-marca, porque hace todo lo que se recomienda no debería hacer. La consistencia se encuentra en que ella, su vida y música transmiten el mismo mensaje, no hay reglas más allá de hacer lo que quiere hacer en el momento.
Billie no es un artista pop convencional, es el la versión alternativa de la música comercial.
3. Gary Vaynerchuk
Si el trabajo duro tuviera nombre de persona sería Gary Vaynerchuk.
No hay duda que es uno de los emprendedores más prolíficos de nuestros tiempos. Se convirtió en un influencer por su dedicación, autenticidad y convicción. Gracias al contenido que genera para plataformas como YouTube, Instagram y LinkedIn, se ha posicionado como alguien que tiene los pies en la tierra y quiere lograr sus objetivos trabajando duro. Gary reconoce que su estrategia – contrario a lo que dicen la mayoría de emprendedores – es trabajar más que nadie.
Cuando lo escuchas es un profesional maduro que domina los negocios y el marketing digital, pero cuando lo ves parece el mismo adolescente amante de los zapatos tenis que empezó a trabajar en la vinatería de su padre.
Es autor de 5 libros sumamente exitosos, en los que enfatiza el valor de la autenticidad y trabajo constante. Su marca brilla en todas las redes sociales por ser transparente y trabajador.
4. Bad Bunny
Lo odias o lo amas, pero no hay duda que la nueva figura de la música latina es Bad Bunny.
Para empezar, no es lo normal utilizar la palabra malo en una marca personal, todas las teorías y expertos recomendarían no hacerlo, a menos que como Benito Antonio Martínez tu idea sea representar la contra cultura de la música urbana.
Visualmente Bad Bunny se aleja del estereotipo del cantante de reggaetón. No esta envuelto en escándalos, no se deja ver con joyas y autos y mujeres, más bien parece un adolecente mal portado. Esto no quiere decir que es normal, todo lo contario, Bad Bunny hace exactamente lo que se le antoja, puede aparecer en una entrevista vistiendo unas sandalias o caminar la alfombra roja en un perfecto esmoquin.
Su música también es así, no suena a nada especifico, puede ser rock, pop, electrónico o sí, urbano, lo que importa es se original.
Conclusiones:
Ser diferente no te hace exitoso nada más porque sí, pero te ayuda a ser conocido, reconocido y recordado, y como hemos visto, en un mundo tan competido, esa es una ventaja enorme.
Los 4 ejemplos que vimos hoy no son los únicos, podemos mencionar a Cristiano Ronaldo, Kim Kardashian, Jeff Bezos, Mark Zuckerberg y muchos más. ¿Qué tienen en común? Todos son exitosos, pero también son transparentes, únicos y atrevidos. No tienen miedo en cambiar las reglas de su industria para que la gente los recuerde.
Todos tenemos algo que nos hace diferentes, puede ser una manera de pensar, como hacemos el trabajo o hasta alguna característica física, ahora lo que nos corresponde es utilizar todo esa para ganar visibilidad, y que la gente que nos interesa voltee a ver nuestro trabajo.
Piensa en qué tienes y cómo puedes utilizarlo.
