Tener talento ayuda, es una realidad, pero para tener éxito en el campo profesional todos necesitamos un poco de suerte. El problema es ponernos de acuerdo en lo que la suerte significa para cada uno.
No estoy seguro dónde la escuche por primera vez, pero la definición que me gusta más y me parece más justa, define a la suerte como el momento preciso en el que la oportunidad se encuentra con la capacidad. Es decir, la suerte no es nada más un acto súbito, también es el resultado de largas jornadas de trabajo, de estudio y aprendizaje, de resiliencia y adaptación que dan forma a una especie de super poder que te convierte en exitoso.
La suerte nunca llega a tu encuentro por sí sola, eres tú quien tiene que salir a buscarla, provocarla y atraparla para utilizarla a tu favor. La buena noticia de todo esto es que la suerte está en nuestras manos y son nuestras acciones quienes la avivan, la acercan a nosotros y nos preparan para el momento de su encuentro. Son nuestros hábitos y mentalidad lo que nos permitirá verla cuando ande cerca y sujetarla para conseguir cualquier cosa que hayamos planeado.
El ejemplo más reciente es el crecimiento explosivo de Zoom en los últimos meses. Un aumento del 728% en las descargas de su aplicación nos deja ver que antes de la pandemia muy pocas personas sabían de ella, pero hoy es prácticamente imposible encontrar alguien que en los últimos 90 días no haya participado u organizado una videollamada a través de su plataforma.
Obviamente, Zoom no ocasionó el confinamiento mundial, pero sí es quien lo ha capitalizado mejor. Desde hace años empezó su trabajo, apostó por las video llamadas como una opción viable para el mundo de los negocios, desarrolló un servicio confiable en un medio controlado y donde dominaban jugadores muy grandes. Zoom mejoró constantemente su oferta y, llegado el momento, convirtió una mala experiencia generalizada en su momento de gloria.
Por supuesto que la historia no ha terminado. A pesar de que Zoom hizo toda la tarea, se ha topado con algunos contratiempos derivados de la falta de privacidad de su servicio y una sobredemanda que, en varias ocasiones, rebasó la capacidad de sus servidores. Pero una estructura sólida, su visión estratégica y su facilidad para reaccionar de manera ágil ha permitido que su cotización en bolsa mantenga un crecimiento exorbitante.
En un mercado que podemos considerar saturado -muchas compañías de tecnología y todas las redes sociales ofrecen un servicio parecido-, Zoom se mantiene como uno de los competidores más sólidos. Montado en la ola de la suerte, se colocan a la vanguardia de la competencia, listos para aprovechar las oportunidades que puedan crear a partir de la “nueva realidad” que ya empezamos a vivir.
Por todo esto es que hoy, las 5 razones son en realidad 5 lecciones para entender el crecimiento explosivo de Zoom y, de ser posible, adaptarlas a nuestra propia experiencia.
Lección 1: Crea productos y servicios que la gente necesite
Siempre será más fácil inventar un producto para un mercado que ya existe, que crear un mercado nuevo para tu producto.
Zoom no inventó las videollamadas, de hecho fue uno de los jugadores que llegó más tarde al mercado.
Esto, lejos de perjudicarlos, les dio la oportunidad de aprender de sus posibles clientes y desarrollar un producto acorde a sus necesidades.
Lección 2: El producto tiene que ser el plan de marketing
Vivimos la era de la información. Hoy todo el mundo es un pequeño medio de comunicación. Inventa un producto o servicio que resuelva uno de sus problemas, y nunca más tendrás que hacer una campaña de marketing.
Si tu producto o servicio resuelve de manera simple y elegante un problema medular de tus clientes, ellos mismos se convertirán en tu fuerza de ventas y equipo de marketing. Las recomendaciones en redes sociales, conversaciones informales y otros foros no se harán esperar.
Lección 3: Nunca menosprecies un mercado pequeño
Si cuando lanzas tu producto apuntas a todo el mundo, en realidad no estás apuntando a nadie.
Hace aproximadamente 8 años, Facebook intentó adueñarse de las videollamadas agregándolas a su plataforma. No hay duda que estaban ofreciendo un producto muy adelantado para ese momento. Por otro lado, Zoom se concentró en servir a los pequeños negocios y los profesionales independientes interesados en la tecnología. Mejoró su producto sirviendo a un nicho del mercado conocido como los “early adopters” (o pioneros del servicio) mientras se preparaba y esperaba la oportunidad para atacar a todo el mundo.
Lección 4: No tengas miedo de modificar la oferta en el camino
Siempre es mejor lanzar un producto medianamente bueno que nunca lanzar un producto perfecto.
Si tienes una cuenta de Zoom, seguramente ya habrás recibido los emails informativos con los cambios que ha sufrido la plataforma en los últimos 3 meses. Cuando sales de tu zona de confort y llegas a lugares que nunca habías llegado, es imposible anticipar todos los problemas que se van a presentar. Lo que sí puedes hacer es crear equipos y ecosistemas de trabajo ágiles e inteligentes para reaccionar lo antes posible, aprender de los errores y corregir en el camino.
Como profesional, no tienes que ser perfecto para ser exitoso, pero sí tienes que aprender a levantarte cada vez más rápido.
Lección 5: Prepárate para lo malo y también para lo bueno
El problema más grande de los pequeños negocios no es encontrar sus primeros clientes, sino conseguir los recursos que se necesitan cuando el negocio crece a los niveles que soñaron.
Como profesionales creativos, es natural prepararnos para resolver los problemas que se pueden presentar en la búsqueda de un objetivo, pero te aseguro que si mañana por cualquier razón tu negocio tiene un crecimiento del 728%, o súbitamente eres nombrado el CEO de la compañía, a pesar de ser buenas noticias, la transición puede ser difícil.
Imagina cómo serán las cosas cuando alcances tus objetivos, qué recursos vas a necesitar, qué ajustes tendrás que hacer y de qué manera tu operación completa va a cambiar.
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Es probable que para estas fechas ya domines la aplicación de Zoom tan bien como cualquier otra. Pero no quiero dejar de recomendarte este artículo útil con algunos trucos para organizar y manejar como un ninja tus videoconferencias en Zoom!
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