| “Ojalá tuviéramos más juntas en la oficina” ¡Hasta crees! 😁 De hecho, puedo asegurar que esa es una de las frases que nunca escucharemos en el trabajo.
Las juntas o reuniones de trabajo tienen una pésima fama y no es gratuita, se la han ganado a pulso. El problema es que tenemos demasiadas, son parte de la cultura laboral moderna y cuesta mucho trabajo eliminarlas, pero siendo sinceros la mayoría son tan inútiles como la bolsita pequeña de los jeans.
Un grupo de las escuelas de negocios más influyentes de Estados Unidos hizo un estudio muy revelador. Después de seguir y analizar la cultura laboral el 76 de las empresas más grandes en el país, concluyeron que el 71% de las juntas son ineficientes, poco productivas y que perfectamente se podían haber evitado.
Si ya te estás sacudiendo la cabeza, espera a leer lo que sigue.
De las mismas 76 compañías, las que se atrevieron a reducir o eliminar las reuniones habituales mostraron un aumento significativo en la satisfacción laboral de sus equipos. La comunicación, cooperación y productividad mejoró significativamente, además que todo el mundo sintió una disminución en los niveles de estrés.
Pero espera, lo más sorprendente es que las compañías que tuvieron los mejores resultados fueron las que eliminaron por completo todas las reuniones. Sin embargo, para ser realistas, es casi imposible hacer que las cosas funcionen sin una sola junta.
Así que no tienes que apretar el botón rojo de emergencia la próxima vez que te llegue la invitación a una junta, o escuches en los pasillos el clásico “vamos a juntarnos para hablar del proyecto”, porque disminuir el 80% de las reuniones es suficientemente bueno.
Estos son los números: Si eliminas 4 de cada 5 reuniones que tienes, puede elevar tu productividad hasta un 74%, la cooperación en un 58%, el micromanagement en un 74% y, al mismo tiempo, elevar el compromiso y autoestima de todos en un 86%. |
