La cafetería como símbolo del cambio

¿Cuándo fue la última vez que entraste a una cafetería a tomar café?

Parece una pregunta tonta, pero dame un minuto para explicar, estoy seguro que puedo convencerte de que no es así. No sé como son las cosas donde vives, pero por lo menos aquí en Miami las cafeterías se han convertido en oficinas virtuales, espacios de trabajo compartidos, repletos de profesionales que no separan la vista de la computadora portátil o realizan reuniones de trabajo con clientes o colegas. Para ellos, la cafetería es más o menos el WeWork del día, donde el precio del café es el equivalente al precio del WiFi por algunas horas. 

La pregunta inicial es válida porque no pasa lo mismo en todo el mundo. Cuando he tenido la oportunidad de entrar a una cafetería en algunas ciudades de Europa, he visto que todavía es un lugar tranquilo para disfrutar, sentarse con amigos a discutir de la vida o perder el tiempo viendo a la gente pasar.

No estoy aquí para decirte que las cosas son mejores en Europa y que deberían ser iguales en todo el mundo, tampoco para defender las tradiciones y hacer un voto a favor tomar café y perder el tiempo. Lo que estoy diciendo es que cuando experimentas las mismas cosas con diferentes perspectivas tu mundo crece, se hace más interesante, aprendes y entiendes que el cambio sucede en diferente niveles y a diferentes velocidades para cada persona.

Cuando quieres cambiar algo de tu vida, estás obligado a cambiar creencias y hábitos que se han formado y arraigado como resultado del entorno en que creciste y vives. Por eso, para realizar una transformación profesional exitosa deberías aprender a ver tu rutina desde fuera, así como hace un extranjero en un lugar donde no vive. Esa visión te ayudará a identificar patrones de conducta y trabajo que no te gustan, y muchas veces te vas reír de cosas que originalmente te harían enojar.

Intenta voltear tu mundo para verlo con otros ojos. Regresa a la cafetería para tomar café, pensar que cosas no te dejan avanzar para conseguir lo que quieres y, de vez en cuando, actúa como extranjero en tu propia tierra. Tu visión y transformación serán mucho más profundas.  

Estas son las 5 claves de una transformación profesional exitosa.

1.- Haz una evaluación honesta de tu situación actual, debilidades y fortalezas 

Tener distancia de tu rutina te ayuda a distinguir mejor los contrastes entre quién eres y quién quieres ser. Llegar a la persona que quieres ser también es un camino arduo, en donde hay que enfrentarse a ver tus propias debilidades. Pero de la misma manera en la que puedes conocer tu propia vulnerabilidad, puedes reconocer de dónde viene tu fuerza.

Tómate el tiempo de hacer una evaluación honesta de dónde te encuentras en este momento, así podrás moverte de manera mucho más sencilla hacia donde quieres estar.

2.- Define qué valores son fundamentales y no debes cambiar 

El cambio es muy bueno, muy importante y absolutamente necesario para el crecimiento profesional y personal. Sin embargo, hay cosas fundamentales que está bien no cambiar. ¿Cuáles son estas cosas para ti?, ¿qué valores no estás dispuesto/a a cambiar? Una vez que definas esto, tendrás un camino mucho más claro, y podrás defender tu visión y tus creencias con mucha seguridad.  

i  n  t  e  r  m  e  d  i  o

3.- Decide qué tienes que cambiar, elabora un plan de acción y establece metas realistas  

Después de establecer dónde quieres estar, es hora de establecer cómo vas a llegar. Elabora un plan de acción con objetivos, tácticas y estrategias. Al establecer objetivos también se estratégico/a, de la manera que mejor te funcione a ti.

La forma más productiva de establecer objetivos es descomponerlos en varios pasos pequeños, porque así tienes más claro tu rango de acción y no te paralizas al ver algo tan grande que parece imposible de hacer.

4.- Estudia, aprende habilidades nuevas y actualiza las que ya tienes 

La mejor manera de crecer y mantenerte relevante es aprendiendo cosas nuevas. Y ahora estamos en un momento histórico en donde el acceso a la educación y recursos es inmensa. Aprovecha esto, y no dejes de aprender.

Busca las habilidades que quieras seguir fortaleciendo, o lo que sabes hacer perfectamente bien, pero que aún te falta digitalizar. Vas a encontrar muchos cursos que te ayudarán a afinar estas habilidades. Y no te olvides de las habilidades suaves, importantísimas para crecer como profesional.  

5.- Pide ayuda, busca un mentor virtual o en persona 

Siempre he dicho que tener un mentor es como un hack para profesionales, porque acelera tu carrera de una manera impresionante. Un mentor puede enseñarte los errores que cometió al principio de su carrera para que tú no los cometas, o dirigirte hacia donde están mejor invertidos tus recursos.

Y ahora puedes encontrar un mentor hasta de manera virtual. Haz una lista de cinco personas con las que te gustaría colaborar, a las que admiras y de las que quieres aprender. Después formula un plan para acercarte a ellas y pedirles que sean tus mentores/as. Y prepárate para crecer.