En mi experiencia, todas las transformaciones tiene tres etapas inevitables:
- Primera: Te da miedo, te niegas, te escondes o pataleas, y piensas que no puedes hacerlo.
- Segunda: El mundo avanza de manera habitual, las cosas cambian y entonces te armas de valor para cambiar (o tu ecosistema profesional te obliga a hacerlo).
- Tercera: Ves para atrás, respiras hondo, sonríes y te das cuenta que realmente cambiaste.
Por mucho tiempo pensé que nunca podría hacer videos de inconfundibleMENTE para YouTube. Pensaba que lo mio era el audio y las versiones escritas para el blog, porque hacer videos me tomaba mucho tiempo. Un día decidí que hacer un programa para YouTube no debía tomarme más de una hora después de escribir el guion. Desde ese día publico dos episodios a la semana, como hacen muchos de los emprendedores y creativos que admiro.
Asumir es un verbo peligroso hasta que alguien decide abandonar una creencia habitual. A finales de los 90, un estudiante de Stanford decidió desarrollar un buscador en internet sin tener conocimientos avanzados de programación en HTML, algo que todo el mundo decía que era necesario. Evidentemente limitado por sus pocas habilidades, imaginó una página con un rectángulo en el centro y nada más. Gracias a su atrevimiento hoy tenemos Google.
Theodore Geisel solía pensar que necesitaba libertad creativa absoluta para escribir sus libros. Un editor lo desafió y le pidió escribir un libro con 50 palabras y nada más. El resultado es “Huevos verdes con jamón”, el libro más vendido de Geisel, mejor conocido como Dr. Seuss.
El “no puedo” casi siempre es un sinónimo de “no quiero”, por eso es tan tóxico. Algunas veces no niego que es válido decirlo, pero creo que es mejor decir “no puedo hacerlo así, voy a intentarlo a mi manera”.
Si alguna vez piensas que no puedes hacer algo, date libertad para hacerlo de otra manera. Hazlo de todos modos, pero hazlo en menos tiempo para ver qué pasa. Utiliza menos recursos y oblígate a pensar. Si es algo que te interesa, lejos de ser molesto, va a ser muy divertido.
La magia de cambiar sucede cuando nos atrevemos, aunque no tengamos lo que se necesita o no sepamos hacerlo en ese momento.
Hoy te comparto 5 buenas razones para intentar algún cambio en el trabajo:
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