Cómo usar Clubhouse y las nuevas apps sociales de salas de audio

by | Jul 14, 2021 | desarrollo profesional

 

En los primeros meses de este año hubo un tremendo revuelo alrededor de Clubhouse, esta app que es un nuevo tipo de red social basada en salas de conversaciones. Después de que las redes sociales nos han tenido muy enfocados en años recientes en empujar a tope el formato de video, nos cayó un poco de sorpresa esta inquietud repentina por empujar en grande este formato de salas basadas en audio.

 

Claro, el formato del podcast tiene ya varios años en ascenso, especialmente acelerado desde que Spotify incorporó el formato de podcasts dentro su servicio, seguido por Amazon Music y Google Podcasts, lo cual fue una franca sacudida para Apple, que tenía varios años dormido en sus laureles como dueña y señora del mundo del podcasting.

 

Pero cuando Clubhouse irrumpió en el panorama hace unos meses, muchos empezaron a hablar de que era la evolución natural del formato del podcast, y que este nuevo formato de salas de conversaciones eventualmente iba a destronar al podcast como formato preferido de consumo de audio. En mi opinión, nada más alejado de la realidad. Si bien estamos hablando también de formatos de audio, el podcast y Clubhouse son muy distintos en otras cosas.

 

(versión video)

 

¿Por qué la euforia con Clubhouse?

 

Aunque Clubhouse es una plataforma muy joven (nació en abril de 2020), ya ha sido descargada por 10 millones de personas en el mundo. Una cifra enorme si consideramos que aún está en beta y que se accede únicamente por invitación (al menos hasta la fecha de grabación de este programa, lo cual puede cambiar en cualquier momento). Además, hasta hace pocos días estaba disponible solamente para usuarios de sistema operativo móvil iOS, recién se abrió para Android.

 

El revuelo con Clubhouse fue causado principalmente por dos cosas: el factor de exclusividad (porque al haberse lanzado como una app de acceso exclusivo por invitación, la hizo más codiciada), y además que muchos personajes de alto perfil, como Elon Musk, Malcolm Gladwell, Oprah Winfrey, Ashton Kutcher o Mark Zuckerberg empezaron a usarlo y a hablar sobre eso en sus redes sociales, especialmente en Twitter.

 

La euforia con Clubhouse inicialmente surgió desde el mundo de las start-ups de tecnología, nada de extrañar si consideramos que la app es creación del ex-empleado de Google, Rohan Seth, y del entrepreneur de Silicon Valley, Paul Davison.

 

¿Cómo funciona Clubhouse?

 

Cuando uno recibe una invitación via mensaje de texto para unirse a Clubhouse, el enlace te lleva directo a bajar la app, y una vez que la descargas, puedes crear tu cuenta.

 

A este punto ya no es tan difícil obtener una invitación como al principio, ya que los usuarios activos van recibiendo más invitaciones a usar entre sus amigos y conocidos mientras más activos están en la plataforma. Así que si preguntas entre tus colegas, amigos, clientes y demás conocidos, seguramente habrá alguien que ya sea parte y que de pronto pueda invitarte. De cualquier modo, Clubhouse anunció recientemente que no tardan en abrir la app para usuarios sin invitación.

 

 

Los 3 pasos básicos para entrar en el mundo de Clubhouse son:

 

1) Eliges tu nombre de usuario y personalizas tu cuenta

Si aún no recibes invitación pero ya quieres reservar tu nombre para que no te lo vayan a ganar, puedes de cualquier modo bajar la app, ya sea de la Apple store o de la de Android, y cuando abres la app puedes elegir el usuario que quieres usar, y si está disponible, puedes reservarlo. Tu cuenta estará inactiva esperando que recibas una invitación para poder unirte, pero al menos tienes ya reservado el nombre de usuario que elegiste.

 

Una vez que ya hiciste tu cuenta, personalízala con toda tu información, enlaces a Instagram, Twitter y un texto básico de biografía, incluso el enlace a tu website.

 

2) Detecta temas y gente que te interese seguir

 

Cuando uno activa su cuenta en Clubhouse, al estar ligada a nuestro número de celular, automáticamente la app va a detectar quién de nuestros contactos está ya en Clubhouse, y podremos optar por seguirlos y estar pendientes de sus actividades o de a qué grupos pertenecen.

 

Como parte de la configuración inicial puedes elegir temas que te interesen, bajo diversas categorías. Luego, uno empieza a ver sugerencias de salas donde hay charlas de esos temas que a uno le pueden interesar. Se puede ver quiénes son los anfitriones, los moderadores y por supuesto, el tema a tratar.

 

3) Conéctate a charlas

 

Si uno se une a una charla en plan de oyente, está automáticamente en silencio, aunque sí es visible nuestra presencia mediante nuestro ícono dentro de la lista de gente conectada. Así que es muy cómodo en plan de exploración, porque uno puede también salir sin ningún problema, nadie te tomará a mal que salgas silenciosamente porque la charla no te enganchó o no era lo que esperabas.

 

Así que uno puede unirse a charlas con expertos y líderes de opinión en todo tipo de temas, tecnología, marketing, nutrición, espiritualidad, moda, estilo de vida, libros, música, negocios, finanzas e incluso grupos para socializar y hasta ciencias ocultas. Hay de todo y para todos. Obviamente no sólo hay famosos y gente reconocida en su campo dando charlas, hay profesionales de todos niveles y de todos los países que te imagines haciendo acto de presencia.

 

Un punto clave de mencionar es que todas las charlas son en vivo y no se pueden acceder posteriormente en grabaciones. Es decir, si no las agendas y entras en el momento que suceden, no hay modo de volver a acceder a ellas. Hasta la fecha, está en contra de las políticas de uso intentar grabar o difundir grabaciones de las charlas, pero no se descarta que en el futuro exista alguna opción o incluso servicio de pago para poder hacerlo.

 

Aunque Clubhouse ha visto detenido el crecimiento meteórico que tuvo los primeros meses, sigue en franco ascenso, y ese formato de consumo social de contenido de audio no va a desaparecer.

 

Las otras nuevas apps sociales de audio

 

Aunque Clubhouse fue la primera que se lanzó con ese formato de salas de audio, no tardaron mucho las redes sociales y plataformas digitales líderes en sacar sus versiones o clones de ese mismo formato de salas de charlas.

 

En mayo de este año, Twitter lanzó Spaces, disponible para ambos sistemas operativos móviles, lo cual de entrada marca una diferencia respecto a la limitante que tuvo Clubhouse durante un año de funcionar sólo para iPhone. Twitter Spaces tiene funcionalidades similiares a Clubhouse, y está integrada directamente dentro de la app de Twitter que ya tenemos en nuestros celulares.

 

Luego entró Facebook en acción, lanzando la tercera semana de junio sus salas de audio en vivo, inicialmente en Estados Unidos pero seguramente muy pronto en la mayoría de los países. Con esta nueva funcionalidad integrada en la app de Facebook que todos conocemos, aquí no se necesitan invitaciones especiales, con lo cual Facebook busca ganar terreno pronto impulsando a su gigantesca base de usuarios a adoptar este nuevo formato de interacción social en charlas de audio.

 

Y prácticamente al mismo tiempo que Facebook, Spotify lanzó también su versión de Clubhouse, llamada Greenroom. Las funcionalidades son muy similares a las de Clubhouse, está basada en salas de audio que uno puede tanto iniciar como participar como oyente. Las dos diferencias más importantes respecto a Clubhouse y a Facebook, es que en primer lugar, en Greenroom existe la posibilidad de que los anfitriones graben sus charlas y las distribuyan como podcasts, y en segundo lugar, que Greenroom existe como una app separada de Spotify.

 

Cómo aprovechar esta nueva tendencia sin enloquecerme con otra red social

 

Ya sé lo que estás pensando, lo que menos necesitamos todos es una red social más que atender, que de por sí nos falta tiempo para usar las que ya tenemos. Eso mismo pensaba yo -y hasta cierto punto lo sigo pensando-, pero la realidad es que tampoco podemos estancarnos en lo que ya controlamos sin intentar al menos sacar provecho de nuevas oportunidades de networking y de interacción, especialmente hablando en el terreno profesional.

 

Confieso que he sido lenta en la adopción de ese formato de salas de audio, por ahora sólo he usado Clubhouse, y tampoco puedo decir que soy “power user”. La verdad es que lo que más trabajo me cuesta es el factor de los horarios, ya que estoy acostumbrada ya a consumir el contenido que me interesa bajo demanda, ya sea en YouTube, en blogs o en cualquier red social. Entro sólo cuando tengo tiempos reservados para eso, para evitar entrar en un hoyo negro que sé que me absorberá demasiado tiempo, más de lo necesario para mis intereses básicos de vida social y profesional.

 

Sin embargo, como con Clubhouse las charlas tienen horarios fijos y se realizan exclusivamente en vivo (sin quedar disponibles para oirlas después), esa parte es la que más se me ha dificultado para usar más la plataforma. Me sucede con mucha frecuencia que cuando encuentro alguna charla que me llama la atención, resulta que es en una hora inconveniente para mí. Sin embargo, he logrado unirme a algunas charlas -unas más interesantes que otras- e incluso he participado como moderadora en un par, y puedo decir que la experiencia es interesante y me gusta en general. Lo que más aprecio y valoro quizás es la parte de hacer relaciones y contactos a nivel profesional, gente con la que más adelante podría haber una colaboración o conversaciones más a fondo.

 

Así que te recomiendo que, según sea el giro de tu trabajo, negocio o proyectos, en la medida de lo posible te des el tiempo para encontrar grupos y charlas de interés compatible, y explorar estas charlas. Por ahora habrá mucha más variedad de temas y cantidad de gente en Clubhouse, pero seguramente pronto las apps de audio en vivo de las demás plataformas irán ganando terreno y serán un tema interesante a descubrir. Date la oportunidad de explorar, conectarte con gente y generar nuevas oportunidades.

 

También te podría gustar: