La historia de Disney es una historia de éxito perfecta para una de sus películas: un soñador con una idea extravagante que después de mucho esfuerzo, resiliencia y adaptabilidad consigue lo que estaba buscando. Esta es la romántica leyenda del éxito que todo el mundo conoce, pero la verdad es que su éxito tiene mucho más detrás. Para entenderla tenemos que regresar hasta los años 20 del siglo pasado.
Desde entonces la compañía fijó una serie de estrategias que continúan vigentes, en gran medida Disney debe su éxito a la misión y visión que los ha distinguido por casi 100 años. Es precisamente este fundamento el que les ha permitido mantenerse a la cabeza en una industria llena de contingencias y transformaciones.
Quien tiene un negocio o se dedica a alguna actividad profesional, sabe que el gran reto para continuar creciendo es encontrar la manera de sobreponerse a desafíos nuevos y vencer sus propias limitaciones. Disney lo hace siguiendo una serie de principios que utiliza para crear contenido y tomar decisiones de negocios. En resumen, todo lo que hacen es evaluado con base en estos postulados:
- Tener una misión sólida y seguirla en todo momento
- Crear contenido de alta calidad para toda la familia
- Adaptar el contenido a las nuevas tecnologías
- Diversificar la marca para llegar a nuevos mercados
- Adaptarse a los gustos y tendencias del mercado
- Finanzas sanas y listas para enfrentar cualquier contratiempo
Como podemos ver, Disney no busca ser una compañía disruptiva, no va a la cabeza de ningún movimiento ni se presenta como ejemplo de innovación. Sus pasos son mesurados, pero no menos decisivos, entienden que su fortaleza no es liderar las transformaciones sino adaptarse al cambio y aprovechar las oportunidades mejor que nadie.
La explosión tecnológica que hemos vivido los últimos años ha transformado por completo la creación y distribución de contenido, el entretenimiento se ha restructurado de pies a cabeza gracias a compañías como Netflix, Hulu y YouTube – entre varias más.
Hasta hace muy poco, Disney había participado de la transformación de manera más o menos pasiva, su papel se limitó a negociar su contenido a los servicios de streaming más establecido. Esto les dio tiempo para estudiar el mercado y preparar sus siguientes pasos.
Era evidente que con su enorme capacidad en la creación de contenido, Disney no dejaría pasar mucho tiempo antes de reclamar un espacio en el mercado. El negocio de la producción de películas y programas de televisión ya no se limita a crearlos y venderlos, hoy para ser exitoso tienes que controlar la distribución de tu producto, por eso desde hace un par de años, la pregunta no era si Disney iba a lanzar un servicio de streaming, sino cuándo lo haría.
El lanzamiento de Disney+
Noviembre de 2020 fue el momento indicado. En medio de la pandemia y con la mayoría del mundo confinado en casa, finalmente Disney lanzó Disney+, su esperado servicio de streaming. De manera inmediata el servicio se convirtió en un éxito, en apenas 24 horas 10 millones de personas lo contrataron, si logra mantener ese ritmo de crecimiento es probable que en menos de 2 años consiga la misma cantidad de suscritores que a Netflix alcanzó cuando cumplió 13 años de operaciones.
Disney no es lo mismo que era hace 10, 20 o 30 años atrás, mantiene su esencia, pero en muchos sentidos ha cambiado, nos puede gustar o no los productos que hace y su modelo de negocio, pero es tan exitosa que bien podemos aprender de su eficacia para adaptarse a nuevos escenarios.
Estas son las 3 lecciones de adaptabilidad de Disney:
1.- Tener una estructura sólida facilita apartarte rápidamente a un escenario nuevo
Transformase requiere de una inversión fuerte de recursos y energía. Es más fácil mover cualquier estructura cuando se tiene un cuerpo musculoso. Adaptarse a un nuevo escenario y ser competitivo requiere reasignar recursos a nuevas tareas y responsabilidades.
Una estructura fuerte no tiene por qué ser rígida, el secreto es mantenerla en forma, afinada con las capacidades y habilidades necesarias para asumir nuevas obligaciones. Nadie duda de la calidad del equipo ejecutivo ni el contenido de Disney, ambos son suficientemente calificados para saltar de funcionar en varios escenarios. Netflix, Hulu y Amazon Prime empezaron a desarrollar contenido específicamente para el escenario del streaming, Disney no, su contenido fue concebido para un mundo diferente, pero es tan bueno, básico y atemporal que fácil se adapta a cualquier plataforma.
Tener una base fuerte, con estructuras sólidas en todos los departamentos es una ventaja en el largo plazo. Puede ser que no seas el primero ni el más rápido en adaptarte, pero cuando lo hagas estarás en condiciones preferenciales, vas a tener el conocimiento de quien lo hizo primero, podrás evitar algunos de sus errores y puedes aprovechar la preparación que has hecho en el pasado reciente. No tengas miedo de formarte o fortalecer las bases de tu negocio, asegúrate de reforzar áreas estratégicas que te permitan competir en muchos terrenos.
2.- Toma riesgos medidos y apostar de manera decidida por ellos
Una vez que Disney consideró que el regreso a la normalidad no sería rápido y que las condiciones nunca sería las mismas que antes, no dudó en seguir adelante con sus planes. No solamente fijó una fecha para el lanzamiento de Disney +, sino que además decidió acelerar y adaptar al nuevo servicio algunas películas y series originalmente concebidas para salas de cine o teatro.
Mulan representa la primer súper producción, realizada originalmente para cines que movió su estreno a las pantallas en lo hogares. Es una de las películas más importantes para Disney en los próximos años, pero no dudaron en apostar con ella en una nueva plataforma. El apoyo y promoción fue absoluto. Esto les ayudó a fijar una posición atrevida, Disney + llega con el mejor contenido disponible, estamos aquí para ofrecer lo mejor de nosotros y lo hacemos desde el inicio.
Para adaptarte a una situación nueva, lo mejor es identificar una o dos de tus mejores cualidades, afinarlas lo más posible y utilizarlas para dejar una huella con tu marca personal.
3.- Es más importante ser el mejor que ser el primero
Desde hace mucho tiempo el crecimiento de Disney se ha dado principalmente sumando a su cartera marca desarrolladas por alguien más. El ejemplo perfecto es la adquisición de los derechos de Star Wars cuando ya era una de las marcas más importantes en el entretenimiento mundial. De la misma manera podemos ver su incursión en los servicios de streaming. Disney no es el primero en arriesgar, no es el más aventurado, no es parte de su ADN ser el primero en todo.
Su fortaleza es estudiar de cerca las innovaciones, aprender de ellas, estudiar como la utilizarlas y en que momento es oportuno adaptarlas a sus planes. Disney no necesita ser el primero en nada, su fortaleza es adaptarse y ser el mejor.
Conclusión:
Disney+ es una historia más de éxito en la carrera de la compañía. Es un ejemplo más de su ejecución impecable. Disney se conoce a ella misma de manera perfecta, todo lo que hace está fundado en su misión y visión, nunca inventan el agua tibia ni pretenden adivinar el futuro por que no lo necesitan. Su trabajo es controlar la situación hasta donde puedan, utilizar sus fortalezas para crecer a partir de ellas y aprender de las experiencias de otros.
Disney continúa desarrollando y comprando contenido de calidad para toda la familia, su columna vertebral son las historias humanas más básicas, es la nostalgia para conectar con la audiencia. Para ellos la innovación es algo que alguien más desarrolla, no les importa ser el primero en nada, pero cuando compiten en algo siempre quieren ser lo mejores.
Me atrevo a pensar que no falta mucho para que Disney marque las reglas en la industria del streaming sin trabajar más que los demás, simplemente trabajando de manera más inteligente, y eso también lo puedes hacer tú.