Cómo vender las ideas en el trabajo (sin que te corran)

by | Ene 20, 2022 | desarrollo profesional

Resulta que tienes una gran idea para mejorar los procesos en el trabajo, enriquecer el producto estrella de la compañía, ahorrar dinero, diseñar la campaña nueva de marketing o como elevar la productividad trabajando desde casa.

 

(Versión en video)

 

Pero resulta que no estás seguro si debes presentársela a tu jefe o cómo deberías hacerlo, porque entre otras cosas te preocupa que lo tome mal, que se adueñe del concepto y la presente como una iniciativa de su parte, o peor aun, te vea como una amenaza y considere que tus mejores días en la oficina llegaron a su fin.

 

Esta situación que podríamos pensar ya no existe en las oficinas modernas es mucho más común de lo que todo el mundo espera. Se estima que, a pesar de toda la literatura sobre el valor de la innovación y solución de problemas de abajo hacia arriba en las oficinas corporativas, más del 70% de los empleados en Estados Unidos no se siente cómodo discutiendo un problema y su posible solución con sus superiores. Peor aun, estudios adicionales han demostrado que incluso cuando los empleados se atreven y hablan, sus sugerencias pocas veces conducen a cambios sustanciales en la manera de trabajar y resolución de algún problema.

 

Obviamente hay muchas razones por las que las ideas – a todos los niveles – nunca son probadas o implementadas. Pero se considera que las dos más importantes son la falta de confianza para presentar las propuestas y la manera en que son enmarcadas.

 

No podemos esperar que todos los jefes reacciones de la misma manera, pero sabemos que más ejecutivos están dispuestos a escuchar e implementar ideas propuestas por su equipo si se presenta como un concepto incluyente.

 

¿Qué quiere decir esto?

 

Que cuando presentes una idea, lo primero que tienes que hacer es ponerte en los zapatos de tu jefe. No se trata de ser un psicólogo y adivinar qué esta pensando, se trata de identificar cuáles son sus prioridades y preocupaciones en el trabajo, además de entender sus fortalezas y debilidades como ejecutivo.

 

Entonces, presentar tu idea de manera envolvente y destacar, antes que nada, cómo es que tu idea le ayuda a resolver alguno de esos problemas, y por qué implementar tu idea le hace la vida más fácil al mismo tiempo que tu obtienes lo que estás buscando.

 

Ser jefe viene con beneficios y obligaciones, pero de ninguna manera dejan de ser humanos, así que si tú tienes miedo de presentar una idea porque te pueden considerar ambicioso, revoltoso o desesperado, tu jefe también tiene preocupaciones, y es muy probable que se sienta inseguro, por eso gran parte del tiempo dice y hace cosas con la única intención de justificar su posición de superioridad. Si este es el caso, una propuesta de alguien de su equipo podría dejarlo mal parado frente a sus superiores.

 

 

Así que antes de presentar cualquier idea, echa a andar toda tu inteligencia emocional, gánate su confianza y utiliza estos consejos para vender tus ideas en el trabajo (sin que te corran):

 

 

1.    Presenta tu idea a la persona adecuada

 

Tu idea tiene que ser presentada a tu superior inmediato.

Tienes que estar seguro de que tu jefe tiene las herramientas para implementarla o llevarla a discusión a un siguiente nivel.

Nunca, por ningún motivo, presentes una idea al jefe de tu jefe o al responsable de otro departamento, a menos que tu jefe esté enterado y tengas su autorización.

Si tu jefe no es la persona adecuada, reclútalo como un aliado para vender la idea al departamento correcto o a la cadena de mando indicada.

 

 

2.    Presenta tus ideas en privado

Es mejor si te acercas a tu jefe en privado, de esta manera se sentirá menos presionado que si lo haces en publico.

Aprovecha el tiempo a solas para descubrir sus planes y aspiraciones, así cómo los objetivos de la compañía, y entonces enmarcar tus sugerencias de manera que todos los objetivos se vinculen.

Tu idea tiene que ser vista como un ganar – ganar. Un concepto que, enriquecido con la experiencia de más personas, ayude a todos en el trabajo.

 

 

3.    Evita mensajes contradictorios

 

Al vender una idea, las personas a menudo la enmarcan combinando dos mensajes: los beneficios de hacer algo nuevo y el riesgo de no hacer nada, esto es un grave error.

Se ha confirmado que los gerentes respaldan propuestas que se centran en una oportunidad y no en una amenaza; si tu mensaje lleva implícito los dos, es muy probable que muera antes de ser implementado.

 

 

4.    Presenta ideas completas y fáciles de implementar

 

Incluso cuando los gerentes entienden la necesidad de implementar una idea, no hay garantía de que la respalden si es muy difícil de activar.

Por eso, es muy importante anticipar los posibles obstáculos y explicar cómo podrían superarse. Considera todos los recursos financieros y humanos que se requerirán, qué tan difícil será conseguir la ayuda de otros y por qué vale la pena dedicar tiempo, energía y capital humano.

 

 

5.    Involucra a tus compañeros (cuando sea oportuno)

Muchas voces son más persuasivas que una sola.

Antes de acercarte a tu jefe, cuando sea oportuno comparte tus ideas con tus compañeros de trabajo, aprovecha para escuchar sus consejos y consulta si están dispuestos a respaldarte. Cuando involucras a todo un equipo tu credibilidad crece.

 

 

Entonces, ¿qué es lo primero que tienes que hacer para que tus ideas se ejecuten?

Si quieres vender tus ideas en el trabajo, y sobre todo que sean implementadas en lugar de que te corran, deja de pensar en ti cuando las presentes.

Pon en el centro de la atención los beneficios integrales de realizarla. Tu idea tiene que ser vista como parte de un proceso de colaboración en el que toda la organización participa y disfruta de sus beneficios.

 

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