Durante muchos años, cuando Taylor se sentaba en una mesa de la cafetería para tomar su almuerzo, el resto de estudiantes se cambiaban de lugar para dejarla sola.
Hacía tiempo que era rechazada, le habían colgado la etiqueta de desadaptada. Su delito: pasar los fines se semana tocando la guitarra y componiendo canciones en lugar de ir a las fiestas de la secundaria.
Taylor se aferró a su pasión, no le preocupó ser discriminada por la mayoría con tal de seguir haciendo lo que más disfrutaba. Con el paso del tiempo consiguió un contrato para grabar su música y mudarse a Nashville. Muy pronto se convirtió en la primer artista mujer en alcanzar el #1 de popularidad con tres álbumes diferentes y de manera consecutiva, una hazaña que solo habían conseguido los Beatles.
Taylor Swift (tal vez has escuchado de ella) es el ejemplo perfecto de que las cosas que te alejan de la mayoría también pueden ser las que te ayuden a ganar el respeto, la popularidad y la admiración.
Cuando eres joven, ensalzar tu autenticidad para ser diferente puede causarte problemas. Para evitarlo y ser aceptados, la mayoría de los adolescentes copian el estilo de los jóvenes mas populares, pretendiendo ser lo que no son. Hoy, esa práctica es muy común entre las compañías y los profesionales.
Tal vez como reflejo de la época de juventud, la mayoría de los negocios y ejecutivos se han vuelto aburridos y predecibles, operan copiando las cosas que hacen las compañías y profesionales más exitosos, asumen que quien lo ha hecho bien sabe algo que ellos no saben, y que si lo repiten van a obtener el mismo resultado.
Pero si haces lo mismo que hacen los demás, ¿por qué razón alguien te va a contratar o hacer negocios contigo? En ese escenario tu única ventaja sería un mejor precio, y en tal caso te deseo buena suerte.
Para competir es mejor ser diferente y auténtico, levantar la voz para resaltar nuestra ideología, nuestra visión e independencia. Es muy probable que al principio el 90% de las personas piensen que estás loco, pero para el 10% puedes ser increíble. Mi recomendación es apostar por ese 10%.
Nuestras diferencias también son las cualidades que nos permiten destacar del promedio, diferenciarnos en lugar de perdernos entre la multitud. Aprovecha lo que te hace diferente, incluso si parece un poco raro, utilízalo para comunicar quien eres. Solamente cuando celebramos nuestras diferencias podemos ser originales e inconfundibles.
Las 5 razones te lanzan 5 preguntas para encontrar qué te hace único y te invitan a utilizarlo para contar tu historia.
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