Por el momento que estamos viviendo, la marca personal no solo importa, sino que importa mucho.
(Versión en video)
Es una declaración muy fuerte que puede parecer exagerada, pero es completamente cierta. Déjame explicarte por qué.
La tecnología continúa avanzando, muchos procesos se han automatizado y millones de personas están trabajando a distancia o de manera virtual, la transformación no se va a detener, al contrario, se va a acelerar. El trabajo y las relaciones van a cambiar practicamente todos los días, conseguir un trabajo o mantener el que ya se tiene se va a convertir en un reto constante, pero a pesar de todo, todavía compramos productos o contratamos servicios de compañías en las que confiamos, y confiamos en ellas por las personas que trabajan ahí.
En estas compañías las decisiones importantes, las estrategias, el análisis, el desarrollo y la creatividad recaen en las personas. Por eso no importa la velocidad o dimensión de los cambios, nuestras relaciones laborales son entre personas, y si las conocemos y confiamos en ellas mucho mejor.
Nos gusta saber quién está detrás de los logotipos, de los nombres y de toda la parafernalia que viene con una compañía, porque sabemos que el trabajo lo hace alguien a quien respetamos y nos genera confianza.
Por todo esto, si tu marca personal es fuerte tendrás o podrás generar muchas más oportunidades de trabajo o negocios. No importa lo que hagas, si tu imagen y reputación es sólida siempre tendrás un lugar asegurado en la esfera profesional.
Obviamente, en un momento en el que la seguridad laboral o el éxito de un negocio nuevo es tan escaso, tener o generar oportunidades se convierte en una prioridad. Ya no se trata nada más de ser bueno y tener muchas habilidades, también se trata de conocer a las personas adecuadas, facilitar que te descubran, ayudar a que te recuerden e identifiquen como alguien profesional con el que se pueden relacionar. Por eso, tomar tiempo y hacer el trabajo para elevar tu marca personal puede ser muy lucrativo.
Por qué desarrollar tu marca personal hoy es esencial
En un mundo tan competido y que cambia minuto a minuto, la marca personal se ha vuelto un aspecto esencial no solo de competencia, sino de supervivencia profesional.
¿No me crees?
Haz una búsqueda de tu competencia en Google. Lo más probable es que encuentres miles de resultados muy similares: mismas ideas, mismas imágenes, mismos productos y servicios. Ahora piensa, cuando alguien tiene un problema que tu puedes resolver, pero existen miles de compañías o profesionales independientes que también pueden hacerlo, ¿en base a qué decidirán contratarte? ¿qué tienes que hacer tú para que más compañías decidan contratarte a ti o comprar tus productos o servicios en lugar de los de tu competencia?
Para mí, la respuesta es simple: diferenciarte y generar mucha confianza.
Estos dos elementos, que como ya vimos, se han convertido en esenciales para funcionar como profesional, se pueden conseguir a través de una marca personal fuerte, sólida y moderna.
La marca personal puede construir confianza y credibilidad
La marca es una combinación entre lo que sabes hacer muy bien, tu experiencia, los logros que has conseguido y tu habilidad para comunicarlo, encontrar la audiencia interesada en los mismos temas y conectar con ellos. Por supuesto que hoy, con el desarrollo de las redes sociales, esto se ha hecho accesible no solamente para las grandes compañías, esto está a tu alcance y es una inversión que no puedes dejar pasar.
Porque cuando logras conocer y conectar, gustar y ganar confianza entonces estás más cerca de generar oportunidades.
Para construir tu marca personal es importante ser autentico y representar muy bien quién eres, qué te importa y por qué eres único y diferente. Nadie quiere relacionarse con una imagen plástica o falsa. Tu marca personal es lo que se queda en la mente de las personas, tus productos y servicios pueden ser los mismos que ofrece alguien más, pero si tienen tu personalidad conectas en otro nivel, es cuando la confianza y credibilidad adquieren un factor diferencial.
Construir una marca personal es una inversión, y como todas las inversiones es más importante que urgente, no pasa de la noche a la mañana ni de manera accidental, requiere esfuerzo, continuidad y enfoque, no genera beneficios de manera inmediata, pero cuando se consolidad es un activo más de tu atractivo profesional. Tener una marca personal ayuda a generar oportunidades y en el mediano y largo plazo puede ayudarte a mejorar tus ingresos.
Estos son los tres usos más lucrativos de tu marca personal:
1. La marca personal te hace más visible
Tal vez, el beneficio más importante y fundamental de desarrollar una marca personal sea el de construir una red profesional de calidad. No se trata de tener números fuera de serie, pueden ser apenas unos cuantos contactos en redes sociales capaces de ampliar tu mensaje para alcanzar a las personas indicadas.
El mundo está híper conectado, la colaboración se ha convertido en un elemento central del desarrollo personal y profesional. De nada sirve ser el mejor en lo que haces si nadie lo sabe. Estar activo en redes sociales y de manera presencial en tu comunidad es vital para expandir tus oportunidades. Ya no tienes que saber hacer todo, tienes que conocer a quien hace lo que necesitas para ampliar tu influencia.
Para construir una marca personal tienes que actuar de manera proactiva e intencional. Ofrecer tus experiencias y conocimientos casi de manera desinteresada, con el único afán de colaborar y esperar que más adelante te paguen el favor de regreso.
2. La marca personal te diferencia de la competencia
Si ya que estás actuando de manera proactiva y conectando con las personas adecuadas puedes llegar a pensar que eso es suficiente, desafortunadamente es apenas el comienzo.
Sí, es vital que te conozcan, pero para conectar, generar una buena impresión y despertar confianza tienes que ser auténtico. Mostrar tus virtudes e intereses de manera honesta.
Nadie puede gustarle a todo el mundo, a menos que todos los días pretenda ser una persona diferente.
Conectar con las personas – pueden ser clientes, empleadores o colaboradores – de manera transparente genera relaciones más largas, duraderas y productivas. Cuando eres honesto y en consecuencia diferente, puede ser que la mayoría te rechace o no le intereses, no importa, yo siempre digo que si es apenas el 10% de personas las que te aceptan como eres apuestes por ese 10%, en el largo plazo eso será mucho más sano, productivo y lucrativo.
3. La marca personal atrae oportunidades
Una consecuencia de construir una marca personal sólida es que se abran más puertas y tengas acceso a mejores y más oportunidades de trabajo o negocios.
Esto sucede cuando alguien con experiencia y credibilidad está dispuesto a compartir su conocimiento. Nadie, o por lo menos nadie que piense de manera productiva quiere aislarse de las personas que le ayuden a crecer, por eso si te preocupas por compartir información con valor serás más recordado y recomendado.
Una marca personal consistente aumenta tu reputación y genera una imagen de liderazgo. Esto, desde luego también se convierte en un imán de oportunidades.
Conclusiones
No importa si te preocupas o no por hacerlo, todos dejamos huella con nuestro trabajo y construimos una reputación. Esta puede ser buena o mala, según tu desempeño y la gestión de tu imagen y trabajo.
Por eso construir una marca personal sólida es una inversión necesaria, que gestionada de manera intencional puede generar buenos resultados en el mediano y largo plazo.
La marca personal implica contar tu historia, dejarte ver, mostrar qué tipo de profesional eres para conectar con las personas adecuadas y crecer tu influencia.
No existen dos historias profesionales exactamente iguales, en consecuencia, no existen dos marcas personales a las que les funcione lo mismo. Sé autentico, comparte lo que piensas y sabes, busca a las personas adecuadas y prepárate para recibir en el largo plazo los beneficios de tu inversión.