Guionista, productor, fundador del festival de cine de Guadalajara y por supuesto, director de cine: Guillermo del Toro es una de las figuras más célebres en Hollywood por la calidad de su arte. Responsable de películas como El laberinto del fauno, Hellboy, Cronos y La forma del agua, entre otras, resulta interesante saber que Del Toro no nació en el seno de una familia con tradición artística. Esto, como ya sabemos, no le impidió desarrollar su pasión y alcanzar objetivos que contadas personas en el mundo han logrado.
Ganador de innumerables premios (Golden Globe, BAFTA, Goya, Palma de Oro en Cannes y por supuesto, el Oscar al mejor director), Del Toro ha construido su camino al éxito gracias s su talento, su facilidad para colaborar, crear equipos y una visión apasionada y empresarial de las cosas que lo inspiran.
¿Quieres saber cómo ha conseguido todo esto?
Estos los 5 secretos de Guillermo Del Toro para alcanzar el éxito:
1.- Tener varios mentores
Guillermo del Toro es dueño de una imaginación extraordinaria. Desde pequeño pasaba larga horas dibujando, dando forma a fabulosos mundos llenos de personajes de horror y fantasía. Su enorme talento era evidente, pero entendió que él solo no podía desarrollarlo hasta donde quería. Entonces trabajo por diez años con Dick Smith, el padre de los efectos visuales. Smith es conocido por sus trabajos en Taxi Drive, El Exorcista, El Padrino y Amadeus. Guillermo recuerda esta etapa como el momento en el que desarrollo la disciplina y ética profesional necesaria para triunfar en Hollywood.
También estudió guionismo con uno de sus grandes héroes – el director mexicano Jaime Humberto Hermosillo, a quien recuerda como un maestro Zen, estricto y amoroso, capaz de desarrollar en ti la resiliencia necesaria para no detenerse jamás.
2.- Cultivar un estilo propio
“Paso una gran parte del día pensando historias, imágenes, colores y decidiendo qué ideas puedo desarrollar”
Sin duda la animación ha sido su pasión más grande, pero también se ha dado la oportunidad de trabajar con actores de carne y hueso.
“Me encanta trabajar en varios terrenos, desarrollar mi creatividad y aprovechar los elementos de un estilo en otro, el cine tiene muchos lenguajes, cultivarlos todos forma tu verdadera identidad”
El trabajo es una ventana para expresar nuestra identidad en muchas dimensiones. Guillermo del Toro lo hace a través de la pantalla, sus historias dejan ver mucho de su personalidad, eso hace que su trabajo sea único y reconocido en todo el mundo por los amantes del cine.
3.- Siempre dar un poco más de lo que esperan de él
“Aún cuando no sea tu proyecto, estás obligado a dar el 110% de lo que tienes”
Nuestro carácter y personalidad se forma a través de los proyectos en los que vamos participando. Antes de ser director de cine, Guillermo del Toro trabajó como agente de bienes raíces, por supuesto que no era el trabajo que quería hacer para toda la vida, pero se entregó a él de manera completa. Según él mismo, era una buena oportunidad para conocer a las personas y descubrir historias.
Hoy sabemos que Cronos, uno de sus primeros trabajos, acabó de materializarse en esa etapa.
La mejor manera de inspirar a un equipo es con el ejemplo. Guillermo siempre lo ha hecho muy bien, es parte de ser director de cine: inspirar y entregarse por completo.
4.- Conocer sus fortalezas y sus debilidades
”Es importante saber en lo que eres bueno y en lo que no. Conocer tus fortalezas y debilidades es una ventaja que puedes utilizar a tu favor”
Guillermo siempre supo que tenía facilidad para los efectos especiales, así que desde muy temprano se aseguró de trabajar de manera gratuita en películas y programas de televisión. Su intención era desarrollar relaciones y esperar un poco para que alguien le pudiera regresar ese favor.
Lo que tú haces de manera natural puede ser muy difícil para alguien más, saberlo es una herramienta que te permite colaborar, establecer relaciones y crear una reputación de experto, utilízalo y pide ayuda en las áreas donde no eres tan bueno.
5.- Alimentar su creatividad todo el tiempo
“Me gusta saltar de proyecto a proyecto sin importar mucho su tamaño, me involucro completamente de manera emocional u espiritual, me mantiene despierto y creativo”
La creatividad es un hábito y un músculo que crece de acuerdo al trabajo que ponemos en ello. Del Toro acostumbra a estar ocupado la mayor parte del tiempo, cuando no está creando o dirigiendo, pasa mucho tiempo en compañía de otros directores, intercambiando puntos de vista, reflexionando sobre los problemas que han enfrentado y cómo los acostumbran resolver. Exponerte a los puntos de vista de alguien más, a sus problemas y soluciones, despierta nuestra parte creativa del cerebro, nos obliga a pensar y cuestionar nuestras propias ideas.
Conclusión:
No cabe duda, Guillermo del Toro es un revolucionario, pero al mismo tiempo es un artista y hasta cierto punto, un emprendedor. Ha sido capaz de alimentar una pasión que nació en él desde joven y crear un estilo de vida a partir de ella.
Como buen director de cine, es un líder, capaz de formar equipo, alimentar su creatividad y la de las personas que trabajan con él al mismo tiempo que experimentar en varios terrenos de la industria cinematografíca.
Del Toro es un ejemplo que el talento no tiene fronteras, y que cuando tienes la visión y eres capaz de poner el trabajo necesario en algo, el único límite eres tú. Creatividad, autenticidad, entrega y dedicación – valores que podemos aprender de esta extraordinaria historia.