Gabriel Sama en las redes:
Twitter: @gabosama
Linked In: Gabriel Sama
Instagram: @gabosama
Recursos mencionados:
Serie: Chef’s Table
Libro: Steve Jobs, por Walter Isaacson
Apps:
Quotes:
- La tecnología no es un capricho, entre más nos informemos, mejor la vamos a aprovechar.
- Mientras más aprendas de tecnología, no significa que la vas a usar más, sino que la vas a usar mejor.
- Hay que meterse a fondo y hacerse un experto en poco tiempo de muchas cosas.
- La clave de un líder es contratar bien.
- La meta sigue siendo la misma: tratar de informar a la gente.
- Los latinos inmigrantes tenemos una visión de superar obstáculos, y nos destacamos por ser más abiertos.
- Uno mismo tiene que encontrar la energía para despertar y tomar la iniciativa.
- Soy bastante testarudo y terco, hay que ser así.
Transcripción de la entrevista:
– INTRO –
Julio Muñiz (Host): ¡Hola!
Bienvenidos a Inconfundiblemente Latino, soy Julio Muñiz. Hoy estamos platicando con Gabriel Sama. Con 20 años de carrera, Gabriel es una de las voces más reconocidas en el periodismo de tecnología a nivel internacional. Ha sido editor para publicaciones de Televisa, The Wall Street Journal y Rumbo Newspaper. Hoy, en su cargo de editor en jefe del portal CNET en español, Gabriel es responsable del contenido en todos los terrenos de la tecnología. No es difícil encontrarlo en las redes sociales o en medios de comunicación comentando las noticas de los gigantes de la tecnología como Apple y Google. Hoy lo tenemos platicando con nosotros en Inconfundiblemente Latino.
Gabriel, bienvenido a Inconfundiblemente Latino. Tienes una experiencia muy amplia, pero cuando te preguntan ¿a qué te dedicas?, ¿cómo lo explicas de la manera más breve?
GS:
Al periodismo de tecnología.
JM:
Platicábamos antes de empezar la entrevista que estás trabajando en varios proyectos al mismo tiempo. ¿Cuál es el que más te apasiona?
GS:
Mi mayor proyecto, es asegurarme que CNET en español, tenga el tráfico que es necesario para que sea un éxito comercial. Cuando estamos hablando de periodismo digital, estamos hablando de audio, video, fotografía. En si es una plataforma multimedia en donde estamos distribuyendo el trabajo a través de distintos canales y hay que estar preocupados por muchas cosas.
JM:
Si tienes un minuto para darles tres consejos a quienes te están escuchando, ¿qué les dirías?
GS:
El primero es que el teléfono se ha vuelto un dispositivo que está con nosotros todo el tiempo. Incluso aquí tengo el mío en la mano. Hay que invertirle dinero, como tiempo porque ahí traemos toda nuestra vida. Si eres de los que contestan sus correos y hablan por el teléfono, es importante invertir. En segundo lugar creo que hay que darse cuenta de que la tecnología no es un capricho. La tecnología está al alcance de todos nosotros y es una oportunidad aprovecharla. Entre más nos informemos, mejor vamos a aprovechar la tecnología. Cuando uno invierte un poco de tiempo en tecnología, tanto ahorra en dinero; como puede extender su experiencia y mejorarla. En tercer lugar diría que todo el mundo tiene la capacidad de entender la tecnología. Si tu no entiendes la tecnología, no es tu problema sino problema del fabricante. Esa es mi filosofía. La persona que diseñó y desarrolló esa tecnología, tiene que hacerlo para que el usuario invierta el menos tiempo en tratar de entenderla. Hay que perderle el miedo y entrarle a la tecnología. Disfrutarla y sacarle el provecho.
Creo que mucha gente lo ve como un tema de honor. La gente que trabaja en la tecnología es la que menos tecnología usa. La usa sólo cuando la necesita. Yo he visto a esas personas decir que no les gusta tanto usar la tecnología y sus hijos están pegados al teléfono. Mientras más aprendes, no quiere decir que más la vas a usar; sino que la vas a usar mejor.
JM:
Yo siempre he creído que es como un nuevo lenguaje. Si hablas más de un idioma, tienes mas posibilidades. Vale la pena invertir un poco.
Lo que hacemos en Inconfundiblemente Latino es celebrar las historias de éxito de los latinos en Estados Unidos. Queremos compartir sus experiencias y consejos que les han ayudado a conseguir el éxito. Queremos inspirar a quienes apenas empiezan una carrera o a quienes no encuentran una manera de impulsar su desarrollo profesional.
En tu caso, ¿qué fue eso que detonó que tu quisieras convertirte en un periodista de tecnología?
GS:
No se la verdad. Yo no tuve un momento de inspiración. Para mi ha sido una cosa que se ha ido construyendo con el tiempo. Primero en la universidad me interesé en las revistas. Siempre coleccioné revistas de niño; y me pareció que armar un equipo para hacer una revista, era un ejercicio divertido. Hice una revista literaria en la universidad. Después hice mi tesis sobre revistas y, mi primer trabajo, fue en una revista. Esas fueron coincidencias y accidentes gratificantes. La historia que hoy cuento es que yo era muy tímido y que una forma de aprender sobre el mundo, era ser periodista. He sido un periodista muy sui géneris porque siempre he sido, más que otra cosa, una persona que ha lanzado muchos proyectos editoriales. Cuando trabajé en el Wall Street Journal, no lo lancé ni tuve una posición gratificante. Es curioso porque es el nombre más importante que hay en mi currículum, pero es el trabajo que menos disfruté. Me gusta hacer algo que ayude a la gente a informarse. Después de las revistas, hice websites, después periódicos, di consultorías a otros para hacer esto y ahora estoy lanzando otro website multimedia y multiplataforma. La meta sigue siendo la misma, tratar de informar a la gente. Lo de hablar de tecnología coincidió con que vivo en Palo Alto y Silicon Valley; y aquí el tipo de periodismo que se hace es el de tecnología.
JM:
Me gusta como describes que uno va ajustando su historia porque la vida no es una línea recta. Llevas casi 20 años trabajando en el mercado de los Estados Unidos, ¿qué ventajas consideras que tenemos los latinos en el mercado actual?
GS:
El mercado es muy caprichoso. Cuando hablamos de Latinos, yo siempre he creído que es un término muy ambiguo. Cuando estamos hablando de nuestra herramienta principal que es el idioma, pues tenemos ventajas y desventajas. Para trabajar en español, tenemos una ventaja enorme. Yo he contratado a cientos de personas porque un proyecto lanzado en Texas, y es muy difícil encontrar profesionales de habla hispana que puedan manejar el idioma a un nivel profesional. Ahora tengo que decirles a los expertos en reclutamiento que yo a la gente que necesito, no es gente que estudio español en la prepa; necesito a alguien que maneje bien el idioma como un profesional. Esa es ventaja. La desventaja es que los medios hispanos son medios de nicho. Hay pocos, son mal pagados, tenemos menos recursos, y en el fondo puede llegar a ser frustrante porque no podemos hacer un periodismo de altísimo nivel.
JM:
Para quien apenas empieza su carrera, ¿en qué campos consideras que los latinos tenemos más oportunidades hoy?
GS:
Ahora estamos con el tema de la diversidad en la industria de la tecnología. Diversidad es también una palabra engañosa igual que “latino”, porque abarca demasiado. Cuando estamos hablando de diversidad de la industria, de nada sirve traer un latino que estudió en Stanford; que su experiencia de vida es la misma que la de una persona no latina. La diversidad viene, no solo del origen, sino de la experiencia de vida. Los latinos tenemos cultura y un estilo de vida diferente. Sobre todo los que somos inmigrantes, tenemos en nuestro ADN una visión de superar obstáculos y damos por hecho que las cosas no van a estar fácil. Esa actitud se ve muy reflejada en la industria de tecnología. Ya en específico de los latinos en general, tenemos una forma de disfrutar y convivir que es muy diferente a la del mercado estadounidense sajón que creció fuera de núcleos. Si traemos eso y eso nos puede beneficiar en muchos espacios donde destacamos por nuestra alegría y capacidad de comunicación. Destacamos por ser más abiertos.
JM:
Me gusta que dices que somos distintos al mercado general. Si tenemos la capacidad de ver esa diferencia en lugar de estar tratando de pertenecer a un mercado al que no pertenecemos; tal vez se abran muchas oportunidades.
GS:
Es un arma de dos filos. Yo viví en San Antonio, Texas; y ahí había latinos, mexicanos; de segunda, tercera o cuarta generación que no hablaban ni una palabra de español. Cuando sus padres o abuelos, llegaron a Texas, les pegaban en la escuela cuando hablaban en español. Esa gente que tiene esa presión encima, les cuesta un poco más de trabajo. Esas personas incluso eran muy mexicanas. Gente sociable, gente muy de familia, gente que viva en sus patios y afuera. Si hay una característica que nos hace diferentes y eso es importante recordarlo. Los que tenemos hijos que nacieron acá, hay que recordarles constantemente cuáles son esas virtudes. En mi caso es fácil porque yo trabajo en español, pero cuando trabajas en el mercado general; la cultura no se aprecia como un beneficio. Empresas como Facebook, Apple, y estas empresas de Silicon Valley; aunque saben que deben tener más diversidad, a veces no tienen claro para que. Si es para atacar otros mercados, o si es para que esa persona le explique a los otros. A veces nomas lo quieren para cumplir con estadísticas. A veces no existe una conciencia clara de cual es el beneficio de ser una persona de otra cultura o multicultural. Los que llevamos acá 17 años, ya pertenecemos un poco a las dos culturas.
JM:
A mi me encantaría ayudarle a la gente, el problema es que la gente no sabe qué necesita.
GS:
Una característica de la cultura estadounidense es que le gusta simplificar. Al latino lo ponen en una canasta muy específica. El ser mexicano significa algo muy específico. Les gusta que todo sea muy resumido. No nos permiten ser gente diversa. Yo soy alto y soy blanco, y como sabes; latino no es una raza. Para ellos es muy difícil entender que es ser latino. Yo les digo que no hay música latina, hay salsa, merengue, cumbia; y tampoco hay comida latina. Incluso no hay comida mexicana, hay comida oaxaqueña, yucateca, etc. Yo prefiero ser complejo a ser simple. La cultura estadounidense prefiere la simplicidad. Ese es un conflicto que se toma tiempo resolver.
JM:
Trabajas en una industria muy competitiva. En tu experiencia, ¿qué necesita hoy en día un profesional para destacar?
GS:
Necesita mucha hambre y mucha paciencia. Necesita tener expectativas realistas y estar muy preparado pero también ser flexible. En mi industria, ya no sirve ser especialista en una cosa, porque si hace 10 años no importaba si no sabías usar el teléfono; hoy si importa. A veces vas a cubrir algo y eres el único de tu medio que está ahí y tienes que hacer videos, fotos, subir fotos a Instagram, clips para YouTube, etc. Tienes que ser una persona mucho más dinámica de lo que era un periodista de antaño. Al mismo tiempo hay que meterse a fondo al tema y ser un experto en poco tiempo de muchas cosas. Yo cubro cosas nuevas. Ser experto en realidad virtual no significa nada porque hace un año nadie estaba hablando de la realidad virtual y uno tiene que hacerse experto muy rápido. Es esa combinación de flexibilidad con entrar a los temas a fondo.
JM:
Hay que ser flexible. La especie que va a sobrevivir es la que se adapta más rápido, no la más fuerte.
GS:
En el periodismo actual, es totalmente cierto.
JM:
Me imagino que para trabajar en un News Room, debes tener la capacidad de manejar varios proyectos al mismo tiempo. Encima de eso, está la tentación del multitasking. ¿Cómo haces tú para identificar tus prioridades?
GS:
Como cabeza del proyecto es difícil porque tengo un equipo pequeño y a veces es me gustaría hacer más cosas y me gustaría escribir y hacer de todo. Cuando eres la cabeza tienes que entender que no te toca hacer todo, sino asegurar de que los demás estén ocupados siempre. Una de mis prioridades es que todo mi equipo esté consciente de cuáles son las cosas más urgentes y al mismo tiempo siempre tengan un proyecto más a largo plazo. Como consultor y como gerente de redacción, mi función siempre es encargarme de que el periodista tenga una visión muy a corto plazo de la nota del momento y que esté planificando siempre algo a mediano plazo. Cuando se trata de la organización diaria, hay hábitos. La redacción son lugares bastante organizados donde hay un ritmo. Se hace una reunión todos los días de una pauta, se asignan las cosas, se le asigna cosas específicas a cada quien, se hacen cierta cantidad de videos a la semana, se hacen cierta cantidad de notas cada día y mi trabajo es mantener ese ritmo de trabajo.
JM:
Tener hábitos y trabajar en nuevos hábitos, siempre nos va a regalar más tiempo para trabajar en las prioridades.
Gabriel, este programa es para todos aquellos que se han caído una y otra vez, pero que se vuelven a levantar. ¿Tu tienes alguna historia de tropiezo donde hayas pensado en no seguir adelante?
GS:
La narrativa se escribe y se rescribe todo el tiempo. Ahorita estoy en un buen momento de mi vida donde puedo ver para atrás y pensar que esos tropiezos fueron fabulosos. Cuando uno está viviendo el tropiezo, no lo ve con tanto optimismo. Para mi ha sido muy difícil estar en Estados Unidos. En México, al año de haberme graduado, ya dirigía una revista. Me di cuenta que me faltaba aprender muchas cosas y pensé en estudiar una maestría en periodismo y aprender lo que me faltaba. El éxito no dura para siempre. En Estados Unidos, porque decidí quedarme porque me llamó la atención vivir más tiempo en Nueva York; tuve que empezar en el Wall Street Journal como traductor. Fue un empleo muy frustrante. Después lancé proyectos que cerraron y estuve, después del último, me tardé 7 años en regresar a una redacción. Es una eternidad. ¿Qué hice? busqué a alguien que se dedicaba a ayudar a otras empresas a lanzar proyectos porque es algo que yo había hecho. Trabajé con una consultora española por un tiempo y me dediqué a escribir un blog y a aprender todo lo que podía aprender del futuro del periodismo. FON, The Future of News, es todo un movimiento para aprender que es lo que se puede hacer para mejorar el periodismo y para sobrevivir esa crisis espantosa que están atravesando los medios en Estados Unidos desde hace más de 10 años. Esos 7 años fueron muy difíciles. Por suerte, a la mitad, me vine a hacer una beca en Stanford. Es una beca para periodistas, pero lo único que me mantuvo fue creer que yo tenía la capacidad de volver a los medios y que era lo que a mi me gustaba. Soy bastante testarudo y terco, hay que ser así; y confiar que cuando no hay un empleo, uno mismo tiene que encontrar muy dentro de si la energía para decir que hoy te despiertas y a escribir. Preguntabas si tuve algún momento de flaqueza donde dije que ya no quería seguir más; tuve muchos. Muchos porque como latinoamericano, mi identidad está muy atada a mi profesión. A mi enseñaron a ser el que provee en mi casa y llegó un punto en lo que yo hacía era cuidar a mis hijos. Fue un regalo, pero en ese momento me ayudó mucho trabajo. Tuve que reacomodar mi identidad y entender que no me tocaba ser el profesionista exitoso, sino me tocaba ser papá. Me tocaba llevar y recoger a los hijos, darles de comer, llevarlos a sus clases, ser voluntario en su escuela; fue una experiencia increíble, pero no estaba muy preparado porque nadie me enseño. Le agradezco a la vida por estos golpes, pero cuando uno está arriba del Ring, lo único que quiere es bajarse.
JM:
Cuando estás pasando por el problema, no se ve de buena manera. Con el tiempo se ve distinta. Hay que creer en uno mismo y levantarse todos los días a hacer el trabajo.
GS:
Una realidad es que cuando llegas a Estados Unidos, lo que pierdes; son tus redes. Uno no se da cuenta que desde la primaria está creando redes que para la gente de clase media alta, los damos por hecho. Aquí hay que reconstruir esas redes. Aquí van más de la mano de la meritocracia y van más de la mano de la utilidad. Si esa persona te necesita, te va a dar trabajo. Es un golpe muy duro a la autoestima. La gente no te levanta el teléfono o que no conozcas a nadie en la industria. Hay que construir esas redes y hay que aprender como funcionan. Yo era muy tímido y lo último que imaginaba era estar haciendo contactos por Twitter. Lo hice como disciplina, pero hay que empujarse. Uno se empuja porque en el fondo sabe que tienes la capacidad y que tienes las ganas de hacer las cosas. A veces se obscurece el asunto y se ven las cosas mucho más negras.
JM:
La dinámica profesional ha cambiado mucho. Se trabaja a distancia y con equipos multiculturales. ¿Qué características debe tener un profesional para ser un líder?
GS:
Yo creo que es muy similar a lo que era antes. Yo creo mucho en encabezar con el ejemplo. Yo me propongo siempre aprender lo que va a hacer toda la gente de mi equipo antes, para poder delegarlo. Yo no delego nada que yo no sepa hacer. Eso no quiere decir que yo lo haga bien, yo contrato gente que hacen mejor las cosas que yo. Es tener el ego bajo control y hay que contratar gente que es mejor que tu. No tenerle miedo a que ellos sobresalgan. La primera clave de un líder es contratar bien. La comunicación es muy importante porque ahora mucha de la comunicación es a través de email o chat. Yo tengo 3 personas que son freelancers de tiempo completo en otros países. Con ellos casi nunca hablo, pero siento que tengo una comunicación muy fluida porque estoy en el chat con ellos todo el tiempo. Se conectan a una junta semanal y hay cierta comunicación. También hay que aprender a ser flexibles. Ahora estoy trabajando con los famosos Millennials, y más allá del cliché, si vienen con otras expectativas. A ellos les gusta mucho más la libertad. Trabajar más en su casa, tener un horario flexible, tomarse a mitad del día tiempo para hacer ejercicio. Me he tenido que volver más flexible con esas cosas. Ya no soy tan micro manager y trato de delegar más cosas. La gente con la que yo trabajo, está ahí por la misma razón que yo que es tener éxito. Sus métodos tal vez son diferentes, pero quiero pensar que ellos quieren tener éxito.
JM:
Comunicarse bien y ser flexible. En tu caso, ¿qué habito personal ha influido en cómo se ha desarrollado tu carrera?
GS:
Cumplir con todas mis deathlines. Como periodista es súper útil. Yo todo lo que digo que voy a hacer, lo hago. Trato de hacerlo lo más rápido posible. Trato de quitarme las cosas de encima lo más rápido posible. Siempre contesto los emails, los teléfonos, etc. A veces creo que no va muy de la mano con mi identidad de mexicano. Mi esposa dice que soy el único mexicano alemán que conoce. Trato de cumplir porque con eso ya tengo mucho del camino recorrido.
JM:
Es algo que se dice mucho en la industria de la producción, pero aplica a todas las industrias. Si entregas las cosas a tiempo, estas adelante del 80% de tu competencia. ¿Has tenido algún mentor?
GS:
Tristemente no he tenido a nadie que yo considere un mentor. Tuve la mala suerte de estar de cabeza de proyecto muy pronto. Trato de copiar los buenos hábitos de otros. Envidio mucho los buenos hábitos de otros. Envidio el éxito de otros y trato de copiarlo también. A veces la envidia es una energía bien poderosa. Eso es lo que me hace tratar de modificar mis comportamientos.
JM:
Es muy interesante, voy a intentarlo ahora. Si pudieras vivir tu vida otra vez, pero con toda la experiencia que ya tienes; ¿qué harías diferente?
GS:
Lo que más detesto en la vida es a la gente que dice que haría todo igual. Se me hace la respuesta más mediocre del planeta. Yo haría muchas cosas diferentes. Pero como eso no va a suceder, mejor las hago hoy. He cambiado mucho y he modificado muchos comportamientos. Trato de mejorar todos los días como persona. Más que el pasado, lo que uno tiene que modificar es el futuro. Ya sabes de esa expresión que dice que la locura es pensar que el mismo comportamiento te va a traer resultados diferentes.
JM:
No hay que cambiar el pasado, hay que cambiar el futuro empezando hoy.
GS:
En este trabajo actual ya cambié mucho mi forma de lidiar con la gente. Acepto que es una generación diferente. No me gusta, pero lo he cambiado. Mucha gente cree que cambiar es una cuestión de debilidad. Cambiar es lo más difícil que uno puede hacer. Admiro mucho a la gente que está dispuesta a cambiar. Al final creo que la esencia de uno permanece.
JM:
Cambiar requiere de mucho valor. ¿Utilizas algún recurso o herramienta para contratar talento?
GS:
Actualmente use mucho Linked In. Es algo que no existía cuando hice el proyecto en Texas. Otra cosa que me es muy útil son las redes sociales. Soy muy activo y hay quien se desconcierta un poco. Cuando veo que hay un estudiante nuevo que acaba de llegar a alguna universidad de aquí, lo invito a mi oficina. Esos estudiantes, después pueden trabajar por lo menos un año. Siempre estoy echando la red. Eso lo hago porque es muy difícil encontrar a alguien que trabaje bien en español. La contratación es de lo más importante que puedes hacer en un proyecto. Hay que hacer Networking sin pena y sin mucha claridad de metas. Porque al final tienes una persona más a la quien preguntarle algo. Mientras uno tenga esa red en la cabeza y una idea de quien te pueda contestar algo, ya es bastante. Es un muy buen hábito decirle a la gente que la estas siguiendo en twitter. Cuando es una persona del otro sexo, siempre hay una cosa medio extraña; pero yo creo que esas barreras se pueden cruzar. Soy alguien totalmente transparente. Yo estoy confiado que la gente a quien contacto no se va a sacar de onda.
JM:
¿Utilizas alguna herramienta para la productividad?
GS:
Usamos mucho el portafolio de productividad de Google. Todas las apps de Google Drive. Google Docs, Google Calendar, etc. Todas ellas tienen versiones móvil. Si tienes que revisar un documento en el carro, sin que estés manejando; puedes hacerlo desde el teléfono. Es un hábito un poco extraño que la gente te pone invitación o junta en tu calendario. Hay que aprender a usarlo y es sumamente útil. Eso combinado con el resto de las aplicaciones de documentos y de hojas de cálculo, es súper útil.
JM:
Recomiéndanos un libro, un blog, podcast, película; que la gente pueda utilizar como fuente de inspiración.
GS:
Se me ocurren dos. Libros te recomendaría la biografía de Steve Jobs, porque Steve Jobs era un tipo muy complejo. Es el mejor ejemplo de esto de en qué momento escribimos nuestra narrativa. Cuando murió, había tenido casi 15 años de éxito. Steve Jobs tuvo fracasos contundentes en su carrera y estuvo a punto de abandonar la industria. Fue un papá terrible, y un tipo bastante imperfecto. Esta biografía nos ayuda a entender al personaje y a entender cual fue el secreto. No era un ingeniero, ni el que diseñaba los productos; era quien siempre estaba empujando a los demás con un estilo un poco agresivo. Otra serie de Netflix que se llama Chef’s Table, me gusta mucho porque presentan la comida de manera espectacular y en prácticamente todas las historias puedes ver como estos Chefs tuvieron momentos difíciles. Es una inspiración.
JM:
Va a estar todo esto en las notas. El de Steve Jobs no lo he leído, pero a partir de ahora está en mi lista de libros por leer. La pasión que mueve a los Chef’s los convierte en artistas. Están en la búsqueda de algo mucho más grande.
Gabriel, ¿qué significa ser latino para Gabriel Sama?
GS:
Yo tenía un colega alemán que decía ” A mi que no me digan que soy Spicy Hot porque yo no soy Spicy Hot “. Era Chileno de origen alemán que le enfurecía que todos creyeran que los latinos son Spicy Hot. Yo tampoco soy Spicy Hot y estos estereotipos, es una invitación a la imprecisión. Somos gente muy compleja. Compartimos una historia cultural y un idioma que nos hace entendernos más fácil. Nos hace ser muy abiertos y nos ayuda a ser multiculturales. Si tenemos unas cualidades especiales que son grandes virtudes. Ser latino es una comunidad. Somos un grupo. Una comunidad de gente que llegó a Estados Unidos por distintas razones y aquí se da cuenta que tiene coincidencias con otros. Esos otros son gente que habla su idioma y tienen las mismas referencias culturales. Cuando llega a un lugar y hay otro latino, es como un imán en donde empiezas a hablar español o a acercarte y sentirte cómodo. Ese confort nos da la habilidad de ser personas de brazos abiertos. Mi casa, he adoptado el día de Gracias y me gusta que no tenga una connotación religiosa particular. Yo hago el pavo todos los años y mi casa, como no tengo ese bagaje americano, lo tomamos muy de fiesta. Yo invito a todos mis compañeros del trabajo. Además bailamos y ponemos música. Yo no creo ser muy prototípico latino, no soy spicy hot y no escuchó música en español; pero cuando se trata de eso, en el fondo he resultado ser mucho más latino de lo que yo creía.
JM:
Somos una comunidad de brazos abiertos. Por último danos un buen consejo y la manera más fácil de contactarte.
GS:
Lo más fácil es que yo estoy en todas las redes sociales como Gabo Sama. Cualquier red social, muy probablemente estoy ahí. En consejos, el mayor es que no doy consejos. Mi mejor consejo es escuchen a los otros, sean compasivos, pacientes y aprendan a convivir con los demás.
JM:
Muchas gracias.
A todos les recuerdo que para recibir todos los episodios en el momento en que son publicados, pueden suscribirse a iclatino en iTunes, Stitcher o su aplicación de podcast favorita. Si les gusta nuestro trabajo, hagan un review en iTunes. Esta es la mejor manera de que más latinos nos escuchen y sean parte de esta comunidad.
Gabriel, muchas gracias. Ha sido un placer y hasta pronto.
GS:
Gracias Julio.