Apple no inventó el touch-screen ni el teléfono inteligente, IBM desarrolló el primer smart phone 15 años antes. McDonald’s no fue la primera cadena de comida rápida, en realidad se copió la idea de White Castle, un restaurante en Wichita, Kansas. Facebook no fue la primera red social, ni Instagram invento los filtros o las historias.
Puedo mencionarte más ejemplos como estos, muchos más, pero lo importante es no perder de vista de que no ser el primero en hacer algo, no impidió a ninguna de estas compañías en convertirse en un éxito comercial, ni tampoco han sido tachadas de copionas o faltas de creatividad, al contrario, todas son consideradas compañías innovadoras.
¿Sabes por qué?
Porque innovar no tiene mucho que ver con inventar, tiene que ver con adaptar y reinventar.